Waldo Wolff, sigue con su estilo "halcón" del PRO en el Ministerio de Seguridad, ahora en un distrito clave del país. En Buenos Aires, apenas Jorge Macri asumió como Jefe de Gobierno, se tomó la decisión de no permitir los cortes de calles que eran habituales. Y ahora, con Wolff al mando, hay preocupación por las cuatro fugas de presos en comisarías en los últimos 15 días. En una entrevista con Infobae, Wolff explicó que la solución es política: los presos deben ser trasladados fuera de la Ciudad, tarea que le corresponde al Servicio Penitenciario Federal.
El problema comenzó en 2020, cuando el gobierno nacional dejó de recibir detenidos de Buenos Aires en las cárceles federales. Ahora, hay 2,200 presos en las comisarías y alcaidías porteñas, más del doble de lo permitido. Además, el 20% de ellos ya están condenados, no solo en prisión preventiva. Wolff insistió en que el gobierno nacional debe hacerse cargo y resolver este problema estructural.
En cuanto a su gestión, Wolff destacó la reducción del personal estructural del Ministerio en un 30% y la renovación completa de la cúpula policial. Se enfocó en recuperar el espacio público, defender a los porteños y respetar a la policía. Respecto a la lucha contra el delito, mencionó una disminución en los homicidios en ocasión de robo, pero también un aumento en los delitos menores, como el robo de celulares.
En materia legislativa, Wolff señaló la importancia de la Ley de Reiterancia, que permitiría mantener presos a delincuentes reincidentes. También destacó la necesidad de una Ley de Salud Mental y la reinstauración del Decreto 70 para deportar extranjeros que delinquen.
Sobre los piquetes, Wolff enfatizó que la policía actúa según la ley para hacer cesar el delito, pero pueden autorizar cortes temporarios de calles en caso de movilizaciones planificadas.
Respecto al sistema judicial, Wolff criticó la falta de procedimientos claros y la demora en los fallos. Destacó la importancia de la Ley de Reiterancia para mejorar esta situación.
Fuente: infobae.com