La dieta de tu mascota es fundamental para su salud y bienestar. Las comidas procesadas, que se encuentran en veterinarias o supermercados, a menudo contienen aditivos y químicos que pueden afectar negativamente a tu felino. En respuesta a esta preocupación, muchos dueños de gatos están optando por una alimentación más natural.

Actualmente, existe un debate entre veterinarios y especialistas sobre las dietas para gatos. Mientras que las redes sociales promueven dietas carnívoras o cambios drásticos en la alimentación, los expertos de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Pensilvania sugieren reemplazar los alimentos balanceados procesados por una dieta natural.

Beneficios de una dieta natural para Gatos

Según los especialistas, una dieta basada en carne cruda o parcialmente cocida puede mejorar la salud de los gatos. Se ha observado que algunos gatos con dietas de alimentos balanceados desarrollan enfermedades gastrointestinales crónicas. La dieta natural, que imita la alimentación de los gatos silvestres—que consumen pájaros, roedores, mamíferos pequeños y reptiles—puede ser más adecuada para su bienestar.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que una dieta cruda requiere suplementos vitamínicos y otros elementos dietarios para garantizar un equilibrio adecuado de aminoácidos, hierro y calcio. Si decides cambiar la dieta de tu gato, hazlo de forma gradual para evitar problemas digestivos.

La base recomendada es la carne, que puede ser de vaca, pollo, cerdo o pescado. La carne puede servirse cocida para facilitar la digestión o cruda para preservar los nutrientes. Si optas por carne cruda o parcialmente cocida, asegúrate de utilizar cortes enteros para evitar la contaminación y verifica la procedencia.

Para el pollo, se recomienda hervirlo unos minutos para prevenir la salmonella. Si decides incluir huesos, asegúrate de que sean crudos y pequeños, ya que los huesos cocidos pueden astillarse y representar un riesgo para tu gato.