Las elecciones del año pasado, reflejaron un diagnóstico claro: Argentina necesita cambios. Sin embargo, el presidente actual puede no ser el adecuado para llevar a cabo esas transformaciones.

Para lograr cambios sostenibles, se requiere la aprobación del Congreso y la capacidad de atraer a la oposición en un contexto de fragmentación política y comunicacional.

Carlos Melconian, antes de las elecciones, comparó a Milei con un rompehielos, sugiriendo que él podría abrir paso para cambios más significativos.

¿Qué sucede si Milei renuncia o enfrenta un juicio político por mal desempeño? Es posible que renuncie antes de una condena, como sucedió con jueces de la Corte Suprema en 2003.

En caso de una destitución, se aplicaría la Ley de Acefalía, que permite a la Asamblea Legislativa elegir un presidente interino.

Esta persona, si tiene éxito, podría competir por la presidencia en 2027 y 2031. La sociedad exige cambios, pero también necesita líderes capaces de implementarlos.

El futuro político de Argentina depende de cómo el gobierno actual y la oposición manejen estos desafíos.