Se quedo sin vidas extra: murió Gilad Pereg, el "hombre gato", condenado por el asesinato de su madre y su tía
En la noche del lunes, Gilad Gil Pereg, conocido como el "hombre gato" debido a su comportamiento felino en la cárcel, falleció en el hospital penitenciario El Sauce de Mendoza. El ingeniero electrónico israelí, de 42 años, había sido condenado a prisión perpetua en noviembre de 2021 por el asesinato de su madre, Pyrhia Saroussy, y su tía, Lily Pereg. A pesar de los esfuerzos de los médicos, quienes intentaron reanimarlo mediante maniobras de RCP, Pereg no sobrevivió a una descompensación.
Pereg fue declarado culpable por un jurado popular en noviembre de 2021, tras un veredicto unánime. Aunque siempre negó su participación en los crímenes ocurridos en Guaymallén en 2019, su comportamiento errático en prisión, donde maullaba y actuaba como un gato, se volvió célebre.
Durante el juicio, Pereg afirmó: “Me están intentando culpar a la fuerza. Quieren decir que yo hice cosas que yo no hice... Es fácil usarme como un target. Por eso, apenas hice la denuncia de que desaparecieron mi mamá y mi tía, enseguida empezaron a buscar la forma para acusarme a mí de su desaparición. Por eso, me hicieron tantos allanamientos en casa”.
El fiscal Fernando Guzzo, quien lideró la acusación, calificó los asesinatos como "despiadados" y argumentó que Pereg tenía plena consciencia de sus actos criminales. Aunque reconoció que Pereg padecía una patología, Guzzo insistió en que no era inimputable. Al final de su alegato, el fiscal mostró una diapositiva que decía: "Ni el maullido más fuerte puede acallar ni distorsionar la realidad de la humanidad del acusado y su juicio crítico al momento del hecho".
El comportamiento felino de Pereg fue documentado por primera vez en marzo de 2019, cuando un video grabado en la cárcel de San Felipe lo mostró desnudo, en cuatro patas, maullando y buscando arañar a los guardias. Este video se volvió viral y desde entonces Pereg fue conocido como el "hombre gato".
Mariano Narciso Castex, un célebre psiquiatra forense, diagnosticó a Pereg con licantropía, una condición en la que un ser humano se siente como un animal. Este diagnóstico fue respaldado por estudios de la Universidad de Harvard y menciones en el libro "Tótem y Tabú" de Sigmund Freud.
Los restos de Pyrhia Saroussy y Lily Pereg fueron encontrados en la propiedad de Gilad Pereg en Guaymallén, Mendoza, donde ambas mujeres habían llegado para pasar sus vacaciones. La vivienda de Pereg, ubicada en Julio Argentino Roca al 600, carecía de servicios básicos y estaba en condiciones deplorables. Además, se encontraron diez gatos, varias bolsas de alimento balanceado y una colección de DVDs pirateados.
Durante los allanamientos, se hallaron cartucheras y fundas para armas, aunque de las 40 armas registradas a nombre de Pereg, solo se encontraron tres en la vivienda. Una de estas armas, que Pereg había denunciado como robada, fue utilizada para asesinar a su tía, mientras que su madre fue asesinada a golpes.