“Ya no aguantaba más”: el relato de la mujer de 65 años que descuartizó a su pareja

06-06-2022   Por: Primera Página

Mafalda Beatriz Secreto tiene 65 años, es costurera y modista y hace tres años su nombre recorrió los medios de comunicación después de un crimen espeluznante. Entre la noche del 31 de mayo y la madrugada del 1° junio de 2019, la mujer mató y descuartizó a su pareja, José Luis Arena (59), en la casa de la localidad bonaerense de Colón donde ambos convivían. Tiempo después, dijo que había atacado al hombre porque “ya no aguantaba más”.

Desde entonces, Secreto permaneció detenida y el próximo lunes comenzará a ser juzgada. Su defensa, asumida por la abogada Raquel Hermida Leyenda, adelantó que pedirá la absolución, al sostener que ella fue víctima de violencia de género y drogada para ejercer la prostitución contra su voluntad.

El crimen de Arena se descubrió la mañana del 1° de junio. Aquel día, la mujer fue a la casa de uno de sus hermanos para decirle que había asesinado a su pareja, y que necesitaba ayuda para deshacerse del cadáver. El hermano quedó estupefacto y sorprendido, y aunque descreía en parte de los dichos de su hermana, unas tres horas después se presentó en la comisaría local para informar a la Policía lo que le había dicho ella.

Así, una consigna policial se dirigió a la vivienda ubicada en la calle 11, entre 50 y 51. Allí encontraron a la mujer, que rápidamente confesó el homicidio. Luego, los peritos que trabajaron en el lugar hallaron el cuerpo de Arena en un galpón del fondo del terreno. Había sido tapado con la lona de una pileta, estaba boca abajo y descuartizado: le faltaban los miembros inferiores a la altura de la rodilla y el brazo derecho desde el codo. Además, presentaba una herida de bala, de un revólver calibre .38, en el maxilar derecho.

 

El crimen ocurrió hace tres años

La autopsia determinó días más tarde que Arena murió producto del disparo de arma de fuego, que le produjo una hemorragia y un hematoma en la nuez. También estableció que el hombre agonizó por lo menos 12 horas, mientras que los cortes fueron realizados post mortem con una amoladora que la mujer había comprado un día antes en una ferretería donde le comentó a un vecino que debía cortar madera.

Secreto estaba divorciada y había empezado a convivir con Arena a comienzos de 2018. En una entrevista a Telefe Noticias meses después del crimen, desde la cárcel contó que al hombre lo había conocido de joven y “de grande” se reencontraron a través de Facebook. Dijo que él había sido “pirata del asfalto” pero que pensó “equivocadamente que él había dejado atrás todo eso”, por lo que decidió darle una oportunidad.

De acuerdo a su versión, al principio Arena “era encantador”, pero “cuando empezó a tomar cocaína de nuevo (…) él empezó a ponerse violento”.

“Para ocultar los golpes yo vivía maquillándome y poniéndome anteojos de sol, siempre, porque no quería que la gente me viese golpeada”, aseguró la mujer, y continuó: “Prácticamente como que yo estaba secuestrada por él, no me dejaba tener amigas, no me dejaba conversar por teléfono con mis hijas”.

 

La mujer relató los hechos de violencia que padeció

Los testimonios de vecinos ratificaron que existían situaciones de violencia y amenazas del hombre a la mujer, a la que incluso llegaron a ver golpeada.

Por este motivo, la imputada había realizado una exposición en la comisaría de la mujer, que dio intervención al Juzgado de Paz, y en la que ella solicitó una prohibición de acercamiento, pero Arena -que había abandonado el hogar- volvió a la casa y obligó a ella a retirar ese pedido.

Secreto dijo que los hechos de violencia continuaron y relató los momentos previos al homicidio: “Esa noche discutíamos porque me cortó el teléfono cuando yo hablaba con mi hija de Carlos Paz. Entré en crisis, ya no aguantaba más. Paso por la computadora donde él había dejado un arma (…) me acerco a donde estaba y le digo ´José´. Él estaba mirando televisión recostado en la cama y yo saqué el arma y tiré”.

Luego, dijo que entró “en shock”, y que ya no se acuerda “de nada”.

 

La mujer está acusada del delito de homicidio agravado por el vínculo

Secreto se encuentra detenida bajo el régimen de prisión domiciliaria. Está acusada del delito de homicidio agravado por el vínculo. En caso de ser encontrada culpable, podría recibir una pena de entre 10 y 25 años de cárcel. El juicio, según lo programado, finalizará el próximo 17 de junio.