La ciencia desentraña el enigma del trastorno de sueño REM: ¿Un indicador de enfermedades neurodegenerativas?

Investigadores confirman que el trastorno aislado de la conducta del sueño podría ser un signo temprano de enfermedades como Parkinson y Alzheimer. Un avance prometedor, aunque aún con precauciones.

25-11-2024 - Por Primera Página

La ciencia desentraña el enigma del trastorno de sueño REM: ¿Un indicador de enfermedades neurodegenerativas?

El trastorno aislado de la conducta del sueño con movimientos oculares rápidos (iRBD) es una afección poco común pero creciente en la que las personas actúan sus sueños, gritan o incluso golpean mientras duermen. Este fenómeno ocurre en la fase de sueño REM, normalmente asociada a la parálisis muscular. Sin embargo, en quienes padecen iRBD, la relajación muscular no se produce, generando conductas físicas y vocales anormales.

Recientemente, un estudio publicado en The Lancet Neurology ha arrojado luz sobre la posible conexión de este trastorno con enfermedades neurodegenerativas, como Parkinson y Alzheimer. Los investigadores, liderados por los científicos españoles Álex Iranzo y Gerard Mayà, hallaron depósitos de una proteína clave, la ?-sinucleína, en áreas del cerebro vinculadas al sueño REM. Este hallazgo abre la puerta a usar dicha proteína como biomarcador para identificar a personas en riesgo de desarrollar estas enfermedades.

Aunque los resultados son prometedores, el experto en movimientos anormales Marcelo Merello señala la necesidad de cautela. Según él, el iRBD podría confundirse con otros trastornos, como el sonambulismo. Además, alerta que no todos los casos de iRBD necesariamente desembocarán en enfermedades neurodegenerativas. De hecho, algunas personas podrían nunca desarrollar Parkinson o demencia, a pesar de tener este trastorno en la juventud.

Este estudio plantea más preguntas que respuestas. Si bien ofrece una base sólida para futuros ensayos clínicos, los científicos advierten que aún es prematuro hacer diagnósticos generalizados. Es un avance valioso, pero los pacientes deben consultar con profesionales de salud antes de alarmarse. Este hallazgo podría ser clave en la medicina preventiva, pero su aplicabilidad real a largo plazo aún está por definirse.