Sergio Massa, exministro de Economía del gobierno de Alberto Fernández y rival de Javier Milei en las elecciones presidenciales pasadas, ha mantenido un perfil bajo desde su derrota electoral. Sin embargo, en privado, el líder del Frente Renovador sigue muy activo, manteniendo reuniones diarias con gobernadores y legisladores de su espacio político. Además, dirige la nueva fundación Encuentro, que produce informes periódicos sobre la situación económica actual, trabaja como asesor financiero para proyectos regionales de fondos de inversión extranjeros, como Greylock Capital Management, y prepara la publicación de su libro "Querer un país", cuya presentación, junto a Jorge Asís, se realizará el próximo mes.
En su rol en el mundo de las inversiones, Massa se ha convertido en una voz influyente. Ayer, dio una charla ante 12 fondos extranjeros, donde expuso su análisis de los primeros seis meses del gobierno de Milei y sus expectativas para los próximos meses en un contexto de alta incertidumbre. Entre los asistentes, según fuentes cercanas a Massa, estaban representantes de Discovery, el fondo estadounidense dirigido por Robert Citrone, quien elogiara al exministro de Economía Luis "Toto" Caputo. Massa habló de macroeconomía, del dólar, de la liquidación de divisas del campo, de la deuda de los importadores y de la acumulación de reservas prevista para la segunda mitad del año. También abordó temas políticos, como la Ley Bases y su posible aprobación o fracaso en el Congreso.
Massa puso especial énfasis en la política del gobierno sobre el tipo de cambio y su impacto en las exportaciones. Explicó que la activación de los seguros del Banco Central, por valor de USD 20.000 millones, ante una eventual salida del cepo cambiario, es incierta incluso si el FMI aportara USD 10.000 millones. En referencia a los comentarios de Caputo en un evento de la Fundación Libertad y Progreso y el CATO Institute, Massa expresó dudas sobre la viabilidad de levantar el cepo cambiario.
Además de su interacción con inversores, Massa considera que la paciencia de la sociedad con el gobierno de Milei se está agotando, pasando de un año a solo tres meses. Esto contrasta con las preocupaciones centrales del Presidente: las elecciones de 2025, mantener la estabilidad macroeconómica y absorber políticamente al Pro.
Las proyecciones del Frente Renovador indican que la aprobación de la gestión de Milei se consolidará por debajo de los 40 puntos. Las perspectivas económicas son desalentadoras, con una inflación en aumento en junio y julio y el regreso del déficit fiscal en este mes. En cuanto al nuevo programa que Caputo planea negociar con el FMI, Massa ve difícil que sea aprobado en el Congreso. Además, anticipa una sequía similar a la que enfrentó durante su gestión ministerial, lo que añade un desafío adicional al panorama económico.
Massa también reconoció en privado la determinación de Milei para enfrentar un contexto complicado, aunque criticó la estrategia del gobierno de centrar sus esfuerzos en influir en la opinión pública atacando a la política en lugar de enfocarse en la gestión.
En el ámbito político, Massa espera que la Ley Bases, si se discute, salga del Senado con numerosas modificaciones. Estas podrían incluir la eliminación de facultades delegadas, cambios en Bienes Personales, un blanqueo coparticipable, un posible aumento del impuesto al tabaco y un Régimen para Grandes Inversiones (RIGI) más restringido.
En resumen, Sergio Massa sigue siendo una figura activa y crítica del actual gobierno, ofreciendo análisis y proyecciones que reflejan su experiencia y su conocimiento del escenario político y económico del país.
Fuente: infobae.com