El cierre del año 2023 no podría haber sido mejor para el gobernador Axel Kicillof. La Legislatura bonaerense le otorgó dos leyes fundamentales para su gestión: la Fiscal Impositiva y el Endeudamiento.
Pero como en toda negociación, este regalo no fue gratuito para el oficialismo. Hubo que convencer a radicales (el sector de Maximiliano Abad, ya que los alineados con Facundo Manes se opusieron), amarillos y libertarios "acuerdistas" para pasar las fiestas en paz.
Además del acuerdo financiero para los 135 jefes comunales, el gobierno tuvo que demostrar confianza antes de que los legisladores dieran su visto bueno. ¿Cómo? Enviando parte de la deuda que mantenía por atrasos en el IOMA, el IPS y otros ítems a las tesorerías municipales.
La ruptura de los bloques de Juntos por el Cambio generó tensiones entre el PRO y los radicales, especialmente en la rosca por los fondos municipales. Sin embargo, tras un intenso debate, se llegó a un acuerdo de 116.000 millones de pesos para los alcaldes.
El primer roce ocurrió durante una charla con el ministro de Economía bonaerense, cuando ambos sectores tuvieron posiciones encontradas respecto al texto de Endeudamiento, llevando la discusión a un punto álgido.
Pero lo que realmente encendió la mecha de la discordia entre los exsocios fue la distribución de los fondos. Los alcaldes y legisladores amarillos acusaron a sus antiguos aliados de acordar con el gobierno algo que no estaba previsto.
Según el texto de la normativa, la asignación del Fondo de Fortalecimiento Fiscal Municipal se realizará mediante el Coeficiente Único de Distribución (CUD) previsto en la Ley 10.559 para el ejercicio 2023, ajustado por inflación. Esto desató el malestar en los diputados y senadores del PRO, quienes consideraron que se había cambiado el acuerdo previo.
El final de esta trama quedará para febrero, cuando se reformule el texto según lo acordado por los presidentes de los bloques. Mientras tanto, los intendentes amarillos siguen reclamando una revisión del "error" y recuerdan que el gobierno se había comprometido a hacerlo.
Hasta el 30 de abril, el Ejecutivo tiene plazo para transferir otro 30% a los intendentes, correspondiente al Fondo de Fortalecimiento Fiscal Municipal, que se estableció como no reintegrable y de libre disponibilidad para todos los municipios de la provincia.
Fuente: latecla.info