Impacto en los pagos con tarjeta Desde el 1° de septiembre, las retenciones impositivas por pagos con tarjeta y otros medios electrónicos dejarán de aplicarse en Argentina, gracias a una medida anunciada por el ministro de Economía, Luis Caputo. Este cambio beneficia a comerciantes de todos los tamaños, que ya no deberán adelantar impuestos como el IVA y Ganancias al recibir pagos electrónicos.
La eliminación de estas retenciones supone un alivio financiero significativo para los negocios, especialmente en un contexto de alta inflación. Hasta ahora, los comerciantes sufrían deducciones al momento del cobro, generando costos adicionales y, en algunos casos, saldos a favor difíciles de recuperar.
Medida celebrada por el sistema financiero El sistema financiero celebra esta medida, ya que promueve la expansión de los pagos con tarjeta y otros medios electrónicos. Con menos retenciones, se espera que más comercios adopten estas formas de pago, aumentando así la formalización de la economía y reduciendo la evasión fiscal.
Caputo también instó a los gobiernos provinciales a eliminar sus propias retenciones, como las de Ingresos Brutos, para alinear esfuerzos con la estrategia nacional. Esta propuesta enfrenta resistencia, ya que dichas retenciones representan una fuente importante de ingresos para las provincias.
Para las provincias, la eliminación de retenciones supone una presión adicional. Gobernadores como Axel Kicillof o Jorge Macri se verían obligados a compensar la pérdida de recaudación con otros mecanismos o recortes de gastos. La medida busca, en última instancia, reducir la carga impositiva total y estimular la actividad económica.
Eliminadas las retenciones, se espera que el sector productivo respire más aliviado. Expertos como César Litvin han señalado que, si bien la recaudación se reducirá inicialmente, el incentivo a la formalización y el aumento de la actividad compensarán el impacto fiscal negativo para el Gobierno.