La colección privada de Paul Allen, cofundador de Microsoft, ha vuelto a sorprender al mundo con una subasta que ha batido récords. Objetos históricos y tecnológicos únicos, como una carta de Albert Einstein a Franklin D. Roosevelt y una supercomputadora Cray-1, han sido los protagonistas de esta velada en Christie's Nueva York.
La misiva de Einstein, en la que alertaba al presidente Roosevelt sobre el peligro de que Alemania desarrollara una bomba atómica, ha sido la estrella de la subasta, alcanzando los 3,9 millones de dólares. Este documento histórico, que revela una de las etapas más cruciales de la Segunda Guerra Mundial, ha generado gran interés entre los coleccionistas.
La tecnología también ha tenido un papel destacado en la subasta. La supercomputadora Cray-1, un hito en la historia de la informática, se ha vendido por más de un millón de dólares. Además, un ordenador personal Apple-1, propiedad de Allen, ha alcanzado los 945.000 dólares. Otros objetos tecnológicos, como una máquina Enigma, han despertado la nostalgia de los amantes de la historia.
La subasta ha ido más allá del ámbito tecnológico. Un menú del Titanic, una carta con el menú de almuerzo del Titanic, se ha vendido por 340.000 dólares, superando todas las expectativas. Asimismo, un archivo de cartas de Jane Goodall, Louis Leakey y Dian Fossey sobre su trabajo con primates ha alcanzado los 40.320 dólares.
Los herederos de Paul Allen han decidido destinar las ganancias de la subasta a diversas causas benéficas, cumpliendo así con el deseo de su padre. Esta iniciativa demuestra el compromiso de la familia Allen con la filantropía y la preservación del legado de uno de los grandes visionarios de la tecnología.
