El fiscal federal Claudio Kishimoto, anticipó más arrestos. Y si bien dijo que las sospechas aun no llegan a la estructura jerárquica de la terminal, tampoco las descarta. Esa estructura está compuesta por el chileno Ultramar y por Vicentín. Miguel, presidente Enapro, dijo que podrían rescindir el contrato.
La Terminal Puerto Rosario, que tiene como uno de los principales accionistas a la cerealera Vicentin, fue allanada en el marco de una investigación por la detección de un megacargamento de cocaína de más de una tonelada, luego de una investigación de la Justicia federal y de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) que dirige el fiscal Diego Iglesias. Ahora lo que se trata de establecer es si existen puntos de contacto con otro operativo que había salido a la luz días atrás y que había tenido como epicentro el hallazgo de un galpón con droga. También allí se estaba monitoreando a la Terminal Puerto Rosario en el marco de la causa penal, que investigó la Justicia Federal de Campana y en un expediente que se conoció como la “Operación Rosario-Dubái”, por la cual se desbarató una banda que tenía más de 1.400 kilos de cocaína en dos galpones. En ese lugar se encontró maíz y los investigadores están tras la pista si bajo esa pantalla se utilizaba la exportación de granos.
El fiscal Kishimoto confirmó que actualmente hay cuatro detenidos y un prófugo y que la droga fue descubierta en los puertos brasileño y holandés, entre maní, y la principal hipótesis es que salieron de Rosario inadvertidos por los “puntos ciegos” que hay en el puerto, rincones a los que nos llegan los controles. “Hay un operación inteligente que se basó en puntos ciegos”, indicó en declaraciones a Radio Dos. Uno de los contenedores contaminados tuvo dos movimientos internos: uno el 22 de junio a las 23.04, cuando fue retirado de estiba original y fue colocado en el piso, y el otro el 24 de junio a las 22.47, cuando fue retirado y llevado a un lugar entre las calles 2 y 3 del predio. Ahí, el container fue dejado en un punto que no puede ser captado por las cámaras de videovigilancia.
Hasta ahora las sospechas apuntan al personal de la terminal, “a las personas que están en constante trajinar”. “Ahí es donde yo tengo mis grandes”, dijo el fiscal, pero aseguró: “Si hay alguien más arriba lo vamos a determinar”.
El fiscal Kishimoto confirmó también una “vinculación” entre el “packaging” de este cargamento, en paquetes con la marca Louis Vuitton con los que se descubrieron en el galpón de Génova al 2400, en Rosario.
Por su parte, el secretario general del gremio de portuarios, Cesar Aybar dijo: “Lo que sabemos es que hubo personas detenidas, algunas estaban fuera de convenio y otros dos eran operadores de grúas, uno de los cuales ya está en libertad”, destacó. Y analizó que todo esto tiene un mal impacto en la fuerza laboral porque pone al puerto como “puerto sucio”.
En las últimas horas se desarrollaron operativos ordenados por el juez Carlos Vera Barros, del Juzgado Federal N° 3, en varios domicilios. Se recabó evidencia y se produjeron al menos tres detenciones. Kishimoto no descartó más y fuentes judiciales confiaron a Ámbito que se está investigando de menor a mayor jerárquicamente, con lo que no se descarta la eventual participación de personas más altas en la escala de autoridades e incluso el involucramiento posible de accionistas entre los que surgen los dueños de la cerealera Vicentin, cuya operatoria con la empresa en cuanto a créditos y un desfalco millonario ya los habían puesto en el ojo de la tormenta. Es por eso que ayer mismo, Guillermo Miguel, presidente del Ente Administrador Puerto Rosario anunció que podrían rescindir el contrato de concesión del puerto de acuerdo al avance de la investigación y a los futuros hallazgos.
