Con el objetivo de contener a quienes están en la calle expuestos a las bajas temperaturas, la Municipalidad de La Plata lanzó el Programa de Atención Integral a Personas en Situación de Calle, que incluye su refugio en alguno de los paradores o una intervención en la vía pública cuando por voluntad y otras situaciones no es posible darles ese cobijo.

El último relevamiento hecho por ese programa y complementado con los datos de las organizaciones civiles que trabajan el tema indica que la cantidad de gente que atraviesa esa situación creció alrededor del 20% desde el año pasado.

“Hay un leve incremento en comparación al año pasado, pero nos preparamos también con más camas”, dijo la secretaria de Desarrollo de la Comunidad, Julieta Quintero Chasman, quien dio detalles de los resultados de los primeros días del programa que incluyó la apertura de un nuevo parador con 50 camas en 122 y 54 para elevar la cantidad de plazas a 112.

La funcionaria indicó que el año pasado hubo entre 100 y 110 personas en el relevamiento y que hoy llegó a 120, de las cuales no todas requieren un lugar en los refugios. "Tenemos 112 camas, por lo tanto, estamos con capacidad para recibir a cualquiera que quiera acceder, salvo algunas particularidades, como quienes tienen patologías psiquiátricas o problemas de adicciones, a quienes por una cuestión de seguridad no podemos dar ingreso”, agregó. Esos casos se abordan con áreas específicas, articulando con Salud Mental de provincia o Adicciones dentro de la Municipalidad.

Los paradores funcionan de noche y quienes duermen se van a la mañana. Sin embargo, el programa funciona con la "voluntad" de las personas que se alojan, pero hay varios deciden quedarse en la calle. “Lo hacen por distintos motivos, porque no quieren perder el lugar, porque se sienten parte del barrio en el que están o porque están cerca del lugar durante el día trabajan”, cuenta Quintero Chasman.

El operativo frío es un refuerzo que el programa de asistencia tiene en el invierno más crudo. "Brindamos la posibilidad de dormir. Pero en el caso de quienes no quieren acceder, porque se trabaja con la voluntad, se ofrece viandas, bebidas calientes, abrigo y frazada como una ayuda momentánea", explicó la funcionaria.

Eso requiere de un trabajo de cercanía muy fuerte, "con un gran compromiso muy fuerte de los trabajadores". "Existe mucho respeto en cualquier vínculo, el compromiso de los equipos para conocer a las personas. Requiere estrategias distintas cada caso. Los equipos salen cada noche a intentar convencer de que existe un lugar mejor y algunos no quieren y se los intenta asistir en el momento”, relató.

"Se trata de construir las herramientas para cada caso y con un seguimiento personalizado, buscando el egreso para reinsertarse de la mejor manera en la sociedad. Tenemos que ser compasivos con cada historia", concluyó.

La estructura municipal de 112 camas se completa con las 20 plazas que hay en el parador destinado a mujeres y niños. Y a otras 42 ubicadas en el parador que funciona en 7 entre 36 y 37, destinado a hombres.

Sobre la cantidad de gente en situación de calle, la funcionaria aclaró que el relevamiento es dinámico y que para ubicar a las personas se trabaja con una geolocalización. Zonas como la Estación de Trenes, las plazas San Martín, Italia y Moreno, las inmediaciones de hospitales como el de Niños o el San Juan de Dios, o calles comerciales como 8 y 50, aparecen en ese mapa. “Las variaciones las vamos anotando y del relevamiento filtrado con organizaciones civiles que trabajan en el tema tenemos estos 120 casos actualmente”, explica.

Sobre el perfil de las personas que atraviesan el momento de estar en la calle, Quintero Chasman dice que los hay “crónicos”, pero también personas más jóvenes que están en esa situación recientemente porque perdieron el modo de pagar el lugar donde vivían.

“Son aquellos que tienen mayor facilidad para reinsertarse después del paso por el parador. Es gente joven que perdió el trabajo recientemente, no pudieron pagar el alquiler informal que tenían y de golpe terminaron en esta situación. Tienen una mayor predisposición y logramos más fácil conseguir las herramientas para aplicar una estrategia de reinserción a través de algún subsidio o de un trabajo que le permita volver a acceder a una pensión o una habitación donde vivir”, explicó. Fuentes: lamovidaplatense.info y 0221.com.ar