Fue el héroe y el protagonista ayer de una jornada gris y lluviosa en el bosque. Moría el partido y Gimnasia caía en la frustración por no poder superar como local a Atlético Tucumán, incluso jugando buena parte del segundo tiempo con un futbolista más. Hasta que a los 49 del complemento, cuando ya se jugaba el último minuto de adicional, llegó el esperado grito de desahogo para que el Lobo vuelva a sumar una victoria y a la vez se mantenga invicto en 60 y 118. Y en medio de esos festejos por el agónico gol, hubo situaciones que no pasaron desapercibidas.
p>Brahian Alemán, que recién había ingresado a los 41, tan solo 8 minutos después se convertía en el salvador de la tarde y con su festejo se robaba todas las miradas. "Los gestos fueron porque últimamente se están diciendo muchas cosas que no son ciertas, que a uno lo lastima y le molesta. Sufre uno, sufre la familia. Porque en vez de preguntar o de saber bien qué es lo pasa o qué pasó, la gente habla, lastima. Le gusta hablar y meter cizaña", aclaró el mediocampista post partido en TyC Sports sobre sus gestos hacia la platea techada, en diálogo con Paso a Paso. El uruguayo, mirando hacia ese sector, apuntó a quienes hablan de más (con sus manos imitó el gesto de voces) y luego se tapó los oídos con sus dedos índices mostrando indiferencia.
En ese momento se escucharon murmullos y reproches desde una de las tribunas laterales del estadio donde estaban agrupados la mayoría de los dirigentes albiaules y los famosos allegados. No es casualidad este ida y vuelta entre los responsables de la comisión directiva, algunos hinchas y el futbolista, ya que últimamente no están atravesando la mejor relación. De hecho en el mercado de pases que acaba de finalizar el uruguayo siempre asomó como una posible opción de salida. Y en el último no fue la excepción, e incluso parecía que con la llegada del Luis Miguel Rodríguez también generaba otro cortocircuito, en este caso por la famosa camiseta número 10, que finalmente conservó el zurdo.
En ese sentido Aleman detalló en la señal deportiva que "todo lo que pasó con el tema del Pulga fue un malentendido. Nunca vino nadie a decirme nada, ni dirigentes ni el mismo Pulga, por eso la sigo teniendo yo", precisó sobre esta cuestión. El propio Rodríguez también se refirió al tema y evitó la polémica: "Por respeto a él, elegí otro número. No pasa nada, el tema es poder jugar". Fiel a su estilo, el tucumano hasta se permitió elogiar a quien le privó quedarse con la camiseta que pretendía. "Fue un partido muy feo, hubiese sido muy triste salir 0-0. Decí que apareció el 10, la metió ahí al lado del palo, y nos vamos más tranquilos" aseguró a la salida del estadio. Fuentes: lamovidaplatense.info y laplata1.com