En una escalada de tensión en la ciudad de Rosario, dos amenazas al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, fueron descubiertas durante la mañana del lunes. La primera nota, encontrada bajo la puerta de la sede de Desarrollo Social, advierte sobre posibles represalias por la demolición de propiedades vinculadas a jefes narco. Investigadores relacionan la amenaza con el derribo de puntos de venta de droga en la ciudad.

La situación se torna más tensa a medida que continúan los derribos de bunkers narco. El secretario de seguridad pública, Omar Pereyra, supervisará la demolición de dos nuevos puestos de venta de drogas en cumplimiento de la nueva Ley de Microtráfico. En paralelo, se imputará a Leila S., pareja de Alan Funes, por amenazar a quienes participaban en la demolición de una construcción vinculada al clan narco.

Posteriormente, una segunda nota dirigida a Pullaro fue encontrada en la ciudad, intensificando la preocupación en las autoridades. La tensión ha ido en aumento desde que el gobernador asumió el cargo y ordenó estrictos controles a detenidos en cárceles provinciales, especialmente en el penal de Piñero, que alberga a sicarios y líderes narco.

En el pasado mes, cincuenta allanamientos se llevaron a cabo en Rosario y sus alrededores como respuesta a amenazas previas al gobernador. La investigación apunta a la posibilidad de que un preso, trasladado recientemente al sector de alto perfil en la cárcel de Piñero, haya buscado retaliar contra la medida.

Recientemente, el Ministerio de Seguridad de la Nación informó que Patricia Bullrich instruyó al Subsecretario de Asuntos Penitenciaros para solicitar el confinamiento inmediato de Francisco "Fran" Riquelme, señalado como el instigador de la segunda ola de amenazas a Pullaro y aliado de Esteban Lindor Alvarado, rival de Los Monos. Riquelme, conocido como "El Pablo Escobar de Empalme", se encuentra detenido en la prisión de Marcos Paz.