Vivimos en un mundo acelerado donde la sensación de falta de tiempo se ha vuelto una constante. Esta percepción del tiempo puede desencadenar ansiedad, culpa y frustración, especialmente cuando no logramos cumplir con nuestras expectativas. Postergamos tareas, acumulamos pendientes y nos sentimos prisioneros de nuestra propia agenda. Sin embargo, entender cómo influye nuestra percepción del tiempo en nuestra salud mental puede ser el primer paso hacia el bienestar.

Desde la antigüedad, la diversidad en la percepción del tiempo ha sido reconocida y estudiada. En la mitología griega, se representaba al tiempo a través de diferentes figuras míticas, como Cronos, Kairos y Aión, cada una simbolizando una manifestación temporal distinta.

La forma en que percibimos el tiempo influye en nuestra respuesta emocional y en nuestra estabilidad mental. En casos de trastornos como ansiedad y depresión, el factor tiempo juega un papel central e incluso puede enmarcar la sintomatología del cuadro.

La noción de tiempo secuencial, representada por Cronos, nos impulsa constantemente a establecer metas y a sentir la presión del tiempo que avanza sin remedio. La falta de cumplimiento de objetivos puede generar frustración y culpa, alimentando aún más la ansiedad.

Por otro lado, Kairos, el tiempo de la oportunidad, nos brinda la posibilidad de cambio y transformación en el momento presente. Sin embargo, para poder percibirlo y aprovecharlo, debemos alejarnos de la voracidad de Cronos y encontrar la tranquilidad necesaria para reconocer las oportunidades que se nos presentan.

En el abordaje terapéutico de trastornos como fobias, depresión e insomnio, es fundamental considerar la relación con el tiempo. La organización del tiempo, establecimiento de prioridades y la práctica de técnicas de relajación como la meditación y el mindfulness pueden ayudar a salir de la tiranía de Cronos y encontrar un equilibrio que favorezca la salud mental.

Es importante destacar que el tiempo no es bueno ni malo en sí mismo, sino cómo lo utilizamos y cómo nos relacionamos con él. Aprender a utilizar el tiempo de manera efectiva y vivir el presente puede ser clave para encontrar la oportunidad (Kairos) y experimentar una sensación de paz y satisfacción.

En resumen, el manejo del tiempo es fundamental para controlar la ansiedad, fobias y depresión. La comprensión de cómo nuestra percepción del tiempo influye en nuestras emociones y la implementación de estrategias adecuadas pueden ser herramientas valiosas en el camino hacia el bienestar mental. Si los síntomas persisten, es importante buscar el apoyo de profesionales de la salud mental para un diagnóstico y tratamiento adecuados.