La investigación comenzó por casualidad. El 5 de enero de este año, Ezequiel Martin Moyano, alias “Huesos”, y Leila Debora Fiama Bustos, fueron detenidos por personal de la Comisaria 8A de la Policía de la Ciudad con vehículos con documentación falsa, una pick up Ford Ranger y una VW Amarok, ambos con pedido de secuestro reciente. Tenían documentación que fue incautada, un celular. Ese teléfono fue la puerta a todos el resto. Las pericias al aparato llevaron a un reporte elevado a la Justicia Federal, con el Juzgado N°1 del fuero a cargo de María Romilda Servini, a cargo de la división Defraudaciones y Estafas de la fuerza porteña.
Los indicios apuntaban a una banda que era literalmente una empresa delictiva, dedicada a la compra de autos robados y su posterior reinserción en el mercado negro con patentes mellizas, una organización que operaba entre Buenos Aires y Santa Fe.
Leila, se descubrió, vivía en Rosario. Se dedicaba a llevar y traer, según la acusación en su contra, llevaba autos sucios desde Buenos Aires para revenderlos en su ciudad. Así, comenzaron intervenciones telefónicas, escuchas en vivo, que ilustran esta nota. No solo compraban robado: también los robaban directamente. El lavado era total: les creaban documentos falsos y les alteraban los números de chasis y carrocería. También, les colocaban una nueva patente para evitar cualquier pedido de captura.
Hoy, la investigación se cierra. Hay 16 detenidos tras 20 allanamientos, con al menos tres prófugos buscados. Se secuestraron siete autos, cinco motos, siete patentes y 23 cédulas verdes, más de un millón y medio de pesos, dólares, euros, pistolas y balas, 40 celulares.
Encima de todo, en la cima de la estructura, se descubrió que estaba un preso: Iván Damián Acuña, sin un número de documento a su nombre, encerrado en la cárcel bonaerense de General Alvear, la misma de donde se fugaron los hermanos Lanatta en diciembre de 2015.
La ficha penitenciaria de Iván Damián habla de cosas bestiales. Está encerrado en General Alvear desde septiembre de 2021, acusado del delito de tentativa de homicidio simple en concurso real con robo a mano armada. También, se lo acusó de otro homicidio criminis causa, en concurso real con abuso de armas. La víctima fue un policía, un subcomisario de la policía . Acuña tiene una condena por este delito, dictada en 2017 y supervisada por el Juzgado de Ejecución Penal N°2 de Lomas de Zamora: prisión perpetua.
La banda se dividía en dos: ejecutores de robos y cerebros. Iván, se sospecha, era el cerebro principal. Desde la Unidad N°30 “suministraba datos para la compra y venta de vehículos robados, así como el uso de tarjetas de crédito robadas y la falsificación de documentos”, asegura un documento de la causa.
Su novia, Jannie María Acosta Fernández también fue arrestada por ser su cómplice y su literal mano derecha. Recibe planes sociales como la Asignación Universal, está registrada en el rubro de venta de muebles de la AFIP. Para la Policía de la Ciudad, Jannie María se habría dedicado a ejecutar las órdenes de su novio, encargada de los encuentros en persona con proveedores y clientes, además de estar involucrada en otro truco de la banda: la compra de objetos con tarjetas robadas, todo desde su casa en Lomas de Zamora. Jonatan, primo de Jannie, también fue detenido, acusado de llevar y traer efectivo.
La banda también tenía servicio de taller, por así decirlo. Un hombre de Lanús Oeste y su hijo se encuentran prófugos, acusados de resguardar los autos robados para luego cambiarles la numeración en chasis, motor y cristales.
Los resultados del operativo fueron presentados hoy en una conferencia de prensa, encabezada por el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.
“La Policía de la Ciudad hizo otra vez un trabajo enorme, que arrancó con una investigación muy compleja y muy profesional, y que termina con una intervención efectiva en el territorio, en este caso más allá de los límites de la Capital. Tenemos una fuerza comprometida, con coraje, que se enfrentó a una banda peligrosísima de delincuentes, con una estructura criminal impactante. Dos de los detenidos incluso tienen relación con Los Monos. Estamos hablando no solo de delitos contra la propiedad, sino de narcos y sicarios. Pero no les tenemos miedo. Es más: no les tuvimos miedo, no les tenemos miedo y nunca les vamos a tener miedo. Los vamos a ir a buscar, en la Ciudad y en cualquier lugar al que se vayan a esconder. El que las hace, las paga”, afirmó el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro.