Las heridas tras el cierre de listas de UP en Berisso, se dejan ver por todos los rincones del kilómetro cero del peronismo. Cientos de referentes de las diferentes agrupaciones históricas que componen el amplio abanico de la militancia justicialista berissense, están que trinan con el líder partidario e institucional que arruinó sus ilusiones de participación electoral.

Fabián "Cometita" Cagliardi es un típico empresario prebendario del Estado, acostumbrado a ganar sin competir. Para destacarse en ese metié, solamente hay que tener padrino, saber dónde tributar, llenarse de plata, hacer lo manos posible e ignorar al resto. El Fabi entendió que así debía manejarse también en la política y tras cuatro años en el poder local, convalida en esta campaña esos métodos.

Luego de bajar la lista de Celi y dejar a Queiffer con boleta corta (una operación parecida a ganar una licitación escribiendo un pliego a medida y sacando de carrera a oferentes mejores por formalidades menores), el intendente sólo piensa en octubre. Pero algo no salió bien en su planilla de cálculos y a un mes del 13-8, la militancia empezó un éxodo masivo desde su hostil rebaño al cálido pesebre queifferiano.

Lo de Vanesa es un verdadero dolor de genitales para el Frank Underwood berissense, ya que no solo le va a restar votos en las PASO, sino que pasando a octubre puede llegar a empeorar aún más el árido paisaje electoral de un intendente al que no le sobra nada. Con Queiffer tomando votos peronistas y Pablo Swar surfeando cómodo sobre la ola amarilla, el futuro del Castillo de Naipes de Cagliardi es incierto y oscuro.

Con Quique y Juani no alcanza, Fabi

Si bien en Berisso no habrá internas PASO, dentro del sector de Unión por La Patria, el frente que aglutina al PJ Nacional y otras fuerzas, la militancia de la ciudad donde nació el peronismo se empieza a encolumnar detrás dos candidatos que disputan una "interna virtual".

Mientras que por un lado aparece la figura del actual Intendente y presidente del Partido Justicialista local, Fabián Cagliardi; por el otro, la imagen de Vanesa Queyffer, candidata que irá con "lista corta", se erige como una alternativa más que potable, que va ganando mucha fuerza entre los partidarios peronistas.

Con diferencias varias entre los candidatos, Cagliardi intenta traccionar votos de la mano del ex intendente Enrique Slezack, el funcionario nacional, Juan Ignacio Mincarelli, y un mix de militantes entre los que aparecen algunos ex referentes de Cambiemos, tal es el caso de la otrora presidenta del Bloque Macrista y ex Garrista, Mariela Cincotta.

Por su parte, alejada del oficialismo por sus diferencias con el rumbo elegido por Cagliardi para su gestión, Vanesa Queyffer presenta un armado plagado de militantes, que aunque menos conocidos, son más cercanos a los barrios.

Vale mencionar que otro punto a tener en cuenta en ésta disputa peronista, es la negativa del Intendente a disputar internas, interfiriendo en las legislativas del 2021 y en las partidarias del 2022, sacando del camino a sus contrincantes y quedando él como única alternativa.

Ese mismo mecanismo lo habría vuelto a usar en éste 2023, cuando se "cayó" la lista del Frente Renovador, liderada por Agustín Celi, hijo  Angel, el histórico dirigente massista berissense, quien pretendía las PASO por dentro del Frente UP.

En una jugada que algunos califican de "brillante", Queyffer, empujada por el Cagliardismo fuera del Frente, decidió ir con una "boleta corta", lo que le permite tener la oportunidad de competir en las próximas elecciones.

Este tipo de hechos, más las disputas del oficialismo con los Trabajadores Municipales, columna vertebral del histórico Movimiento Peronista, hicieron que hoy, la figura de la edil peronista, creciera en la consideración de los militantes y por primera vez desde su asunción, Fabián Cagliardi, tenga serias chances de perder los favores del Movimiento que lo llevó al sillón de la intendencia en el 2019.