¿Balcedo se quedó con el Chiche de Kraiselburd? Una historia de periodistas y no tanto
La prestigiosa agencia periodística Nova publicó a primera hora de este domingo una nota crítica sobre las nuevas autoridades de una magra institución que dice representar a los periodistas. Nosotros quisimos ampliar y dar nuestra opinión al respecto.
El Círculo de Periodistas de la provincia de Buenos Aires es algo muy parecido a aquellas "comisiones de damas" de la alta sociedad, que florecían al cobijo de los indolentes poderes establecidos entre fines del siglo 19 y gran parte del 20, donde los ricos y super ricos creaban y sostenían instituciones nefastas a su antojo y conveniencia.
El vetusto diario El Día de La Plata, decano del periodismo bonaerense, nació y se crió (N&C) en el escenario antes comentado, por lo que se nutrió de aquellos vicios y nunca pudo abandonarlos. A pesar de los cambios tecnológicos y políticos de las últimas décadas, el octagenario director del "papelito" de Diagonal 80, mantiene sus prácticas y expone a cielo abierto su inexorable decadencia.
Raúl Eduardo Kraiselburd, nacido el 12 de mayo de 1944 en La Plata, dirige el diario El Día desde el año 1974 y ha hecho un verdero culto de su participación en instituciones representativas del sector. Fue presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) entre 1994 y 1995 y es el único argentino que presidió la Comisión de Libertad de Prensa y el Comité Ejecutivo de esa entidad, donde fue designado cinco veces en ambos cargos.
Actualmente, Kraiselburd integra el Consejo Consultivo de la SIP y ostenta el cargo de Vicepresidente en la Comisión Legales; fue vicepresidente de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) y Presidente del Consejo Latinoamericano de Acreditación de la Enseñanza del Periodismo (CLAEP).
Raúl Kraiselburd también preside la Fundación Florencio Pérez, que ostenta como objeto social colaborar en la lucha contra las adicciones y se nutre de jugosísimos ingresos, área donde se destaca ampliamente la millonada que llega cada mes desde el nefasto empobrecedor de almas desesperadas Bingo La Plata.
Dueño de El Día, Noticias Argentinas (NA) y participando en otras empresas periodísticas como en Diario Popular, este hombre que en 14 días llegará a sus ocho décadas de edad, sigue aferrado a viejos dogmas y antiguas ideas del periodismo, como el diario de papel, ese arcáico elemento de museo al que defiende con uñas y dientes a pesar de su nula rentabilidad.
Pero ¿porqué hablamos tanto de Raúl Kraiselburd en una nota del Círculo de Periodistas de la provincia de Buenos Aires? Sucede que esa institución opaca y absolutamente desconocida para el público en general, funcionó siempre como un apéndice y vocero institucional de El Día, expulsando impunemente cualquier intento de participación de todo periodista ajeno a la "órbita Kraiselburdiana".
Sin embargo, la llegada de Antonio "Chiche" Guillén a la presidencia del Círculo de Periodistas PBA, llama demasiado la atención, dada su colaborativa relación histórica con Marcelo Balcedo, el enemigo público número uno de Raúl Eduardo Kraiselburd.
1) ¿Chiche se pasó a las filas de Raúl?
2) ¿Raúl perdió tanto poder que Marcelo le ganó la puseada en su propia casa?
3) ¿Un grupito de pícaros se quedó con la joya del abuelo distraído?
En medio de fuertes tensiones, cartas documento, amenazas de impugnaciones y otros puteríos, el Círculo de Periodistas de la provincia de Buenos Aires renovó autoridades y con la asunción de Antonio "Chiche" Guillén recuperó la entidad del control que ejercía el diario El Día.
Según fuentes muy afiladas, hasta pocas horas antes de la asamblea de renovación parcial de autoridades, el ahora ex presidente Hugo Beto "Peón de Diagonal 80" Mársico, intentó dejar la presidencia en manos de la ex funcionaria bruerista Alejandra Sturzenegger, hermana del autor del criminal plan de ajuste de Javier Milei, Federico Sturzenegger.
Alejandra también es una "empleada" del diario El Día, por su desempeño en la Fundación Florencio Pérez, que preside Raúl Kraiselburd tradicional diario y que recibe fondos del Bingo, el establecimiento donde miles de platenses empobrecidos van a dejar lo poco que tienen, movidos por aquello de "el que juega por obligación, pierde por necesidad".
La movida de Mársico, un ex concejal alakista que a poco de asumir Bruera pegó el garrochazo pero no fue aceptado por el intendente inundador por lo que trató de probar suerte con el massismo donde tampoco le dieron bola más allá de algún ayudín con forma de contrato para algún familiar, no prosperó por la resistencia que Alejandra Sturzenegger genera en el mundillo de los verdaderos periodistas, es decir, los que laburan de periodistas.
Para justificar que la idea era indefendible, desde diagonal 80 se armó una "historia oficial" que la misma Sturzenegger se encargó de difundir: "el Turco Alak me pidió que me baje, que me dedique al Ematur".
Como se sabe, Alak puso a Sturzenegger en ese cargo como forma de mimar a el El Dia en su nueva etapa de relaciones y como favor por haber jugado en la campaña en contra de Julio Garro, un intendente no puesto por el matutino. Los memoriosos recuerdan que la guerra con El Día allá por 2003 le costó el "Bruera es Agosto".
Los impulsores de la candidatura de Sturzengger se defendieron de la crítica de que ni siquiera es periodista diciendo que "es cronista de turf".
Pero el retruque fue "no es periodista y al turf la vincula que es dueña de caballos de carrera y que duerme con un jockey".
La noticia de que la Sturzenegger no sería la presidenta del Círculo cayó muy mal en diagonal 80 y según se asegura en diferentes corrillos, Kraiselburd habría ordenado impugnar la asamblea.
Para esa triste tarea habría convocado a una empleada de "confianza" de su redacción a quienes sus compañeros, que desde hace tiempo luchan a brazo partido por mejores salarios y condiciones de trabajo, quieren poco y nada por su postura carnera.
Además, en el ambiente del diario es conocida como La Loca, por las fuertes reacciones que suele tener en discusiones dentro y fuera del diario.
Lo cierto es que "La Loca" habría enviado una carta documento amenazando con impugnar la asamblea argumentando que nadie la había convocado, toda vez que en la comisión que se renovó figura como secretaria de actas.
En la nueva comisión Laura Rómoli mantiene entonces su cargo lo que significa que también mantendrá su rol de "topo" de El Dia dentro de la entidad.
Más allá de ese puterío, el comentario generalizado en el ambiente periodístico es que "Kraiselburd perdió el Círculo de Periodistas". Y reflexionaban sobre lo que implica en estos tiempos la merma del poder por parte de algunos medios de comunicación.
El diario El Día ya dejó de poner y sacar intendentes. Lo de Bruera fue su último experimento y ya sabemos en la tragedia que terminó.
Ahora ya no coloca ni al presidente del Círculo de Periodistas, una entidad que, a decir verdad, no tiene mucho peso en las fuerzas vivas de la ciudad pero conserva una "Chapa" que algunos han sabido y saben aprovechar habilmente: léase subsidios, contratos ñoquis para parientes y gatienzos, pauta publicitaria para medios "amigos" y alguna que otra golosina.
Presidente: Antonio Guillén.
Vicepresidente: Willy Cavia.
Secretario, Jorge Basterretche.
Tesorero: Alejandro Carranza Di Biasse.
Secretaria de actas: Laura Rómoli.
Vocales titulares: Mario Cajade, Claudio Gómez, Félix Lugones, Roberto Guerrero y Miguel Aguirre.
Vocales suplentes: Roberto Plano, Omar Barale, Alcides Aguirre y Sandra Campos.
Organo de fiscalizacion: Martín López Lastra, Adalberto Reinares y Alejandro Salamone. Suplentes: Hernan Marty, Margarita Torres y Guillermo Gallo.
Lo de Guillén, nuevo presidente del Círculo, es sumamente llamativo. Proveniente de la más rancia derecha menemista-duhaldista, fue asesor de prensa del ex fallecido presidente de la Cámara de Diputados Osvaldo Mércuri, además de titular de titular del Sindicato de Prensa Bonaerense.
A “Chiche” Siempre se lo ha acusado de cobrar de los dos lados del mostrador, ya que mientras ejercía su labor de sindicalista, con un dudoso patrimonio adquirió varias FM en la ciudad de La Plata, y siempre fue funcional al poder de turno, dejando completamente desprotegidos a los trabajadores de prensa, sindicato del cual sigue siendo parte, como delegado ante la Fatpren.
La mutación de Guillén ha sido curiosa. De ser un derechoso peronista luego se cameló en defensor de las pañuelitos verdes, usando en sus redes términos inusuales en un hombre que épocas de José López Rega hubiera sido vocero de la Triple A, apelando a epítetos como “misógino y machista” en referencia a periodistas contrarios a él. Una joyita.