El presidente Alberto Fernández reconoció que "le gruñía" al actual Gobernador bonaerense hasta que se reunieron en una parrilla. La anécdota completa.

"Cuando hablé por primera vez con Axel nos gruñimos, no voy a mentir", comenzó a relatar Alberto Fernández. Es sabido que el Presidente por ese entonces se encontraba alejado del kirchnerismo, militaba en las filas del Frente Renovador y no se ahorraba críticas para la política económica del entonces Ministro de Economía de Cristina Fernández de Kirchner.

"Yo le criticaba cosas y él se defendía con una enorme entereza y una enorme honestidad intelectual", sostuvo el Presidente. En el archivo aún se pueden encontrar los tweets que Alberto dedicaba a cuestionar medidas, declaraciones y decisiones del actual gobernador bonaerense. Por ejemplo, el acuerdo con Repsol para reestatizar YPF.

Pasado pisado, en 2018 Fernández retomó su relación con Cristina Fernández de Kirchner y volvió a acercarse a todo el arco de dirigentes kirchneristas, entre los que destacaba Kicillof. Eran los últimos años del gobierno de Mauricio Macri, la crisis económica ya golpeaba al país y comenzaba a gestarse el Frente de Todos para las elecciones de 2019.

"En ese momento, cuando terminé la primera reunión, me invitó a comer a una parrilla en una esquina que era imposible, pero bueno ahí fuimos. Cuando terminó la reunión le dije 'qué pena no haber trabajado con vos, ojalá algún día podamos trabajar juntos'", contó el Presidente.

Aunque los almuerzos de camaradería, una tradición entre los dirigentes peronistas, no son frecuentes en el Gobernador bonaerense, aquella comida en una tradicional parrilla argentina fue un puntapié para la relación y el armado que triunfaría a fines de 2019.

"Me estoy dando el gusto todos los días de trabajar con Axel, todos los días", remarcó Alberto Fernández mientras Kicillof aplaudía en aprobación e improvisaba un pseudo abrazo con distanciamiento social.

"Pagué la cuenta", recordó el Gobernador bonaerense. "¡Pagó la cuenta, el asado lo pagó él, de eso dejo constancia!", concluyó el presidente entre risas y bajo el aplauso de los funcionarios presentes que se mostraron divertidos por la anécdota, poco frecuente en ese tipo de actos.

El Presidente buscó con esa anécdota dar un mensaje de aliento a sus funcionarios, en medio de la situación crítica que atraviesa el país por la pandemia de coronavirus, y los cuestionamientos a los que están expuestos.

"La verdad es que somos un gran equipo de trabajo. Le ponemos mucha fuerza, mucha garra. Aunque a veces nos hace falta más. Sí, es muy posible", finalizó el Presidente. Fuentes: visionpolitica.info y infocielo.com