La reunión entre Luis Caputo, Santiago Bausili y los representantes de los bancos por el canje de bonos terminó siendo un duro revés para el gobierno, con consecuencias inmediatas en los mercados financieros argentinos. Los activos del país sufrieron fuertes caídas, mientras que el Riesgo País y el valor del dólar aumentaron significativamente.
Fuentes cercanas a la reunión en el Banco Central informaron a LPO que los banqueros salieron más preocupados de lo que entraron, sin claridad sobre los detalles y las implicancias del plan gubernamental. El anuncio del viernes pasado, que dejó la posibilidad de un canje compulsivo flotando en el aire, no hizo más que alimentar los temores existentes, los cuales se vieron reforzados durante el encuentro de este lunes con los funcionarios.
El mercado reaccionó de manera negativa, castigando especialmente a los activos argentinos y a los bancos, que parecen ser los más perjudicados por las incertidumbres respecto al canje propuesto. La falta de precisiones por parte del gobierno ha exacerbado las preocupaciones entre los inversores.
El presidente de la Asociación de Bancos Argentinos (ABA), Claudio Cesario, intentó calmar los ánimos al describir la reunión de manera menos alarmista, aunque admitió que aún no hay detalles concretos sobre el plan de canje. "Esperamos normativas claras del Ministerio de Economía y del Banco Central que guíen la programación monetaria y la liquidez del sistema", señaló Cesario.
En Wall Street, las acciones argentinas sufrieron pérdidas significativas el lunes, con caídas de hasta un 8%, siendo los bancos los más afectados. Los bonos también registraron pérdidas cercanas al 3,5%.
El Riesgo País aumentó casi un 4%, superando los 1500 puntos, lo que representa un obstáculo considerable para el retorno del país a los mercados internacionales.
El dólar no quedó al margen del castigo, con el blue alcanzando un nuevo récord nominal al cerrar en $1.405, un aumento de 40 pesos. El MEP y el CCL también superaron la barrera de los $1400.
En respuesta a la situación, Caputo se vio obligado a recurrir a apoyos del sector público y de "manos amigas" para intentar contener la situación del dólar, involucrando al Banco Nación y a las financieras Max y Allaria, según revelaron fuentes del mercado.
Esta situación refleja un momento crítico para la política económica del gobierno, con desafíos significativos por delante para restaurar la confianza de los inversores y estabilizar los mercados en un contexto de incertidumbre persistente.
Fuente: lapoliticaonline.com