Críticas y tensiones en CaMarCo por parálisis de obras públicas y deudas millonarias
En un ambiente cargado de tensiones, la convención anual de la Cámara Argentina de la Construcción (CaMarCo) fue escenario de fuertes intervenciones por parte del presidente Gustavo Weiss, quien no dudó en expresar su preocupación por la parálisis en el sector de la construcción. Antes de confrontar al ministro Luis Caputo, Weiss también se dirigió al secretario de Obras Públicas, Luis Giovine, durante un panel más temprano en el evento.
Durante la jornada, Weiss enfatizó que la situación no se debe a un cataclismo natural, sino a decisiones deliberadas del gobierno nacional para priorizar el frente fiscal, según reportó LPO. "La parálisis de la obra pública está teniendo un impacto fiscal enorme", señaló Weiss, destacando que hay 3,500 obras nacionales paralizadas, muchas sin recibir pagos desde noviembre pasado y sin perspectivas de solución o reinicio.
En respuesta a las críticas de CaMarCo, el secretario Giovine defendió la gestión actual, contradiciendo los números presentados por la cámara empresarial. Giovine mencionó que al inicio de su mandato recibió una cartera de 6,600 obras, y destacó que el 40% de estas ya estaban finalizadas. Sin embargo, admitió que de las restantes 2,700 obras, muchas fueron eliminadas de la planificación debido a rescisiones contractuales y otros problemas administrativos, dejando solo 376 obras en curso, además de 914 que podrían ser transferidas a las provincias.
Tanto el ministro como el secretario minimizaron la magnitud de las obras restantes, describiéndolas como proyectos de menor escala como cunetas, rotondas y veredas. Ninguno de los funcionarios abordó directamente el reclamo sobre las deudas pendientes con las empresas constructoras, un punto enfatizado por Weiss en su intervención.
El principal obstáculo identificado para el traspaso de estas obras a las provincias es el financiamiento. No se ha especificado públicamente cómo se costearán estos proyectos, aunque los gobernadores presentes en el evento, Maximiliano Pullaro y Rogelio Frigerio, sugirieron la posibilidad de recurrir a organismos multilaterales de crédito para obtener financiamiento externo.
El debate en la convención de CaMarCo refleja las preocupaciones y discrepancias en torno a la gestión de la obra pública y el financiamiento en Argentina, destacando la complejidad y los desafíos que enfrenta el sector de la construcción bajo las políticas actuales del gobierno.