Investigadores buscan cuantificar la "edad biológica" a través de pruebas de sangre que analizan la salud celular, desvinculando la edad cronológica. Aunque algunas empresas ofrecen pruebas directas al consumidor, los expertos advierten sobre su confiabilidad.

La edad biológica mide el daño acumulado en el cuerpo debido al envejecimiento natural, entorno y hábitos. Steve Horvath propuso un "reloj" epigenético en 2013, analizando cambios moleculares en el ADN para correlacionarlos con la edad.

Empresas venden pruebas que usan la epigenética para calcular la edad biológica, pero los relojes epigenéticos no brindan información clara sobre la salud individual y pueden generar resultados poco confiables. Además, no hay consenso sobre cómo revertir la edad biológica.

Las pruebas de sangre convencionales también se ofrecen para medir la edad biológica basándose en indicadores como el colesterol o la hemoglobina A1c. Aunque debatido, algunos creen que miden factores modificables, a diferencia de la edad epigenética.

En resumen, los especialistas aconsejan cautela ante las afirmaciones de precisión en la determinación de la edad biológica a nivel individual mediante estas pruebas.

Fuente: infobae.com