La Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados vivió una reunión caótica el miércoles pasado, donde se esperaba designar autoridades y formalizar su composición. Sin embargo, el encuentro se interrumpió abruptamente debido a un escándalo que evidenció las tensiones internas y llevó a la fractura del bloque libertario.

Marcela Pagano había sido nombrada presidenta de la comisión, pero su designación fue impugnada desde su propio espacio político. El presidente de la Cámara Baja, Martín Menem, afirmó que el nombramiento era inválido y que suspendió la reunión debido a la disconformidad de varios legisladores con la composición de la comisión.

Pagano, luego de dos días de silencio, negó las afirmaciones de Menem a través de redes sociales. Aseguró que nunca se votó la conformación de la comisión en ninguna reunión de bloque y desmintió cualquier consenso sobre las autoridades. Además, expresó su compromiso con el proyecto libertario liderado por Javier Milei.

Sin embargo, las tensiones persistieron y el bloque de La Libertad Avanza se fracturó. Oscar Zago fue destituido de la presidencia de la bancada y decidió formar su propio espacio parlamentario, el Movimiento de Integración y Desarrollo (MID), junto a otros diputados.

Por otro lado, La Libertad Avanza, ahora con 38 diputados, será presidida por Gabriel Bornoroni. En medio de esta situación, la oposición cuestionó la validez de la votación de autoridades y la incertidumbre rodea la próxima convocatoria de la Comisión de Juicio Político.

El escándalo expuso las divisiones internas del espacio libertario en el Congreso, mientras la oposición observa atentamente el desarrollo de los acontecimientos.