La FIA (Federación Internacional de Automovilismo) ha anunciado su aprobación para que el equipo estadounidense Andretti se convierta en la escudería número 11 en la Fórmula 1 a partir de 2024-25, tras más de dos años de evaluación. Sin embargo, todavía enfrenta obstáculos importantes antes de unirse oficialmente a la parrilla.

La FIA elogió a Andretti Formula Racing LLC por cumplir con los criterios de selección establecidos, marcando el camino para su ingreso. Aunque la FIA ha dado su aprobación, el equipo de Andretti ahora debe llegar a un acuerdo comercial con la Formula One Management (FOM), que posee y gestiona los derechos comerciales del campeonato, así como los logotipos y la marca oficial.

El principal obstáculo radica en la resistencia de los miembros de la FOM a permitir la entrada de un nuevo competidor en la parrilla. La FOM está compuesta por 30 personas, cada una de las 10 escuderías existentes tiene un voto, y cualquier propuesta debe ser aprobada por al menos 25 miembros.

Un punto crucial es que la escudería solicitante debe contar con las capacidades financieras necesarias para competir en la F-1, lo que se ha convertido en un punto de fricción, no tanto por Andretti, sino por el resto de los equipos. Según informes, Andretti ya tiene los 200 millones de euros requeridos para unirse al campeonato, según lo acordado en el Pacto de la Concordia de 2020.

Sin embargo, algunos jefes de equipo consideran que esa cifra está obsoleta y proponen una suma significativamente mayor. A pesar de que Liberty Media y la FIA argumentan que las escuderías no tienen derecho a bloquear el acuerdo basándose en el acuerdo de 2020, la última decisión recae en la FOM, donde la mayoría de las escuderías están en desacuerdo con las cantidades sugeridas.

La entrada de Andretti Formula Racing sería un importante desembarco en la F-1, respaldado por General Motors y con un historial en otras competiciones de motor. A pesar de los obstáculos, la posible inclusión de Andretti promete agregar una nueva dimensión al mundo de la F-1, aunque aún se enfrenta a desafíos significativos para hacerlo realidad.