Horacio Marín asumió como presidente de YPF con un plan ambicioso, denominado "plan 4 x 4", que busca multiplicar el valor de la empresa en los próximos cuatro años, concentrándose en actividades rentables y eficientes.
Inspirado en Petrobras y Ecopetrol, el plan se centra en el desarrollo de Vaca Muerta y la gestión eficiente del portafolio de la empresa, con la mira puesta en alcanzar los USD 25.000 millones de valor para finales de 2027.
Los cuatro pilares del plan incluyen el enfoque en proyectos rentables, la revisión y optimización del portafolio, la eficiencia operativa en exploración y producción, y la viabilización del Gas Natural Licuado (GNL) en asociación con Petronas.
Este enfoque estratégico pretende convertir a YPF en un actor clave del mercado energético, aumentando las exportaciones de hidrocarburos y generando un superávit en la balanza comercial.
El plan también contempla la venta de activos en pozos maduros y una mayor inversión en sectores rentables como el de generación de energía y el desarrollo de nuevas tecnologías en investigación y desarrollo.