Javier Milei intensifica su confrontación con el Grupo Clarín, acusándolo de querer desestabilizar al gobierno. El presidente arremete contra el multimedios más grande del país, alegando interpretaciones maliciosas de sus acciones y vinculándolo con intereses de la "casta" y la pérdida de pauta oficial.

Esta no es la primera vez que Milei ataca a Clarín. Previamente, cuestionó su rol ante la habilitación de empresas como la de Elon Musk y vinculó al grupo con otros competidores, como Carlos Slim.

Estos enfrentamientos se enmarcan en una estrategia de polarización mediática, imitando modelos como el de Donald Trump y fortaleciendo la afinidad ideológica con La Nación +.

El choque sorprende dado que, en general, los medios del Grupo Clarín mantienen una posición relativamente conciliadora con el gobierno.

Sin embargo, la estrategia de Milei busca consolidar el apoyo de su base electoral y radicalizar el discurso, especialmente a través de La Nación + y las redes sociales.

Detrás de este panorama, surge la incertidumbre sobre la reacción de los dueños de La Nación ante una escalada en la disputa con Clarín.

La alianza estratégica entre ambos grupos podría verse comprometida, dejando al medio en una posición incómoda. Por el momento, el diario La Nación mantiene posturas independientes, incluso más críticas hacia el gobierno que Clarín.

El enfrentamiento entre Milei y Clarín no solo agita el panorama mediático, sino que también revela tensiones y alianzas estratégicas en el complejo entramado de los medios de comunicación en Argentina.