Hace ciento veinticuatro años, la oficina de patentes de Estados Unidos registró una de las marcas más icónicas de la historia: “His Master’s Voice” (La voz de su amo) junto con su logo para la Victor Recording Company, posteriormente conocida como RCA Victor. Este registro incluía la imagen de un perro que, aunque no hizo nada extraordinario en vida, se convirtió en uno de los canes más reconocidos del mundo. Se llamaba Nipper, y su historia mezcla lealtad, ternura y el implacable mundo de los negocios.

Nipper nació en Bristol, Inglaterra, en 1884 y falleció en 1895, siendo enterrado en Kingston upon Thames, en un parque pequeño donde hoy se encuentra una sucursal del Lloyds Bank. Una placa de bronce en la pared del banco recuerda al perro que descansa en sus cimientos.

Aunque algunos dicen que Nipper era un Jack Russell terrier, otras fuentes sugieren que podría haber sido un terrier de pelo liso o un cruce de Bull terrier. Su nombre, Nipper, significa chiquillo o muchachito, pero también se refiere a un ave de presa, ya que solía morder la parte posterior de las piernas de los visitantes.

Su dueño, Mark Henry Barraud, era un escenógrafo del Prince’s Theatre. Tras su muerte en 1887, Nipper pasó a manos de los hermanos de Barraud, Philip y Francis. Francis, un artista plástico, pintó a Nipper tres años después de su muerte, sentado frente a uno de los primeros fonógrafos de cilindro de la compañía Edison Bell.

El gerente de Gramophone Company, William Barry Owen, sugirió a Barraud que cambiara el fonógrafo de cilindro por un modelo “Berliner” para que la empresa comprara su obra. Barraud hizo los cambios, manteniendo a Nipper en la misma pose con su cabeza inclinada hacia la izquierda. Gramophone compró la pintura y los derechos por cien libras, una suma considerable en ese entonces.

Nipper se convirtió en un ícono de la música grabada, representado en discos, etiquetas y aparatos de RCA Victor, HMV y JVC. Aunque algunas discográficas modernas han dejado de usar su imagen, su legado perdura. Una estatua gigante de Nipper puede verse en el edificio de RTA en Albany, Nueva York, y otra en Baltimore. En Inglaterra, una pequeña estatua adorna el Merchant Venture Building en Bristol, cerca del antiguo Prince’s Theatre.

Nipper es recordado como el perro que llevó música a millones de hogares, desde Mozart hasta Los Beatles, todo mientras se sentaba frente a un gramófono con una mirada inquisitiva.

Esta es la historia de Nipper, el perro que alcanzó la inmortalidad sin hacer nada, pero cuyo impacto en la cultura musical es innegable.