La fractura interna en el PRO de la provincia de Buenos Aires ha escalado en la Legislatura, con movimientos significativos que reflejan una lucha por el control y la representación. Lo que comenzó con la salida de un grupo de diputadas afines a Patricia Bullrich ha evolucionado hacia una disputa por posiciones clave en el Consejo de la Magistratura bonaerense.
En medio de este conflicto, el bloque liderado por Agustín Forchieri, respaldado por Diego Santilli, reclama su derecho como primera minoría para ocupar lugares estratégicos, argumentando la cohesión y el apoyo al gobierno nacional como fundamentos principales. Por otro lado, el sector de Florencia Retamoso, PRO Libertad, defiende su autonomía y rechaza las presiones por posiciones específicas, optando por enfocarse en la libertad de acción legislativa.
La discusión también se extiende a la reorganización de comisiones legislativas, donde el PRO planea reemplazar a miembros que han migrado al bloque PRO Libertad, asegurando una representación más alineada con sus intereses.
Más allá de las cuestiones normativas y legislativas, la interna del PRO en la provincia de Buenos Aires refleja tensiones que podrían influir en la estrategia electoral futura, mientras continúa la búsqueda de una identidad clara y estratégica frente a las próximas elecciones.
Los próximos meses serán cruciales para el partido, que enfrenta desafíos internos mientras intenta mantener su cohesión y relevancia política en un contexto de cambios y reconfiguraciones estratégicas.
Fuente: infobae.com