Con el inicio de septiembre, los argentinos se enfrentan a nuevos aumentos en servicios esenciales. Gas, luz, telefonía, e Internet, entre otros, verán incrementados sus precios, en un contexto de alta inflación.
Aunque el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de julio fue del 6.3%, se espera que el de agosto, que se publicará próximamente, alcance cifras de dos dígitos. La incertidumbre también rodea al índice de septiembre, que se dará a conocer antes de las elecciones generales de octubre.
Estos aumentos están relacionados tanto con la tendencia inflacionaria del país como con la devaluación del 22% implementada por el Gobierno después de las elecciones primarias.
La Secretaría de Energía confirmó que en septiembre, el precio que se paga a los generadores de electricidad aumentará un 11%. Esto afectará a los hogares en las categorías de ingresos más altos, a los usuarios de ingresos medios, así como a las industrias y comercios.
En cuanto al gas, por ahora no se ha anunciado un aumento adicional para los hogares conectados a la red, pero las garrafas experimentarán un incremento en septiembre. Mientras tanto, las empresas de gas están solicitando un aumento significativo para mantener sus márgenes de ganancia.
En mayo, el Gobierno autorizó aumentos en las tarifas de televisión, telefonía e Internet hasta diciembre. Sin embargo, algunos sectores solicitan aumentos mayores. En septiembre, estos servicios subirán un 4.5%.
Además, se espera un aumento en los precios de algunas plataformas de streaming, como Netflix, que ya anunció incrementos de hasta el 67% en algunos de sus paquetes.