Desde que la jurista Joan Williams publicó, en 1989, su teoría sobre las mujeres profesionales que abandonaban sus carreras debido a expectativas laborales poco realistas, ha pasado un largo camino. La presión para estar disponible todo el tiempo y la falta de flexibilidad en el trabajo han sido históricamente diseñadas para hombres casados con amas de casa. Ahora, la pandemia ha alterado estos paradigmas, permitiendo la experimentación con el trabajo a distancia.
Antes de la pandemia, el "estigma de la flexibilidad" hacía que aquellos que aprovechaban opciones flexibles fueran vistos como menos comprometidos. La pandemia cambió esta percepción, con la creencia de que un trabajador ideal ahora puede presentarse en persona solo parte del tiempo. Para mujeres, especialmente madres, este cambio ha sido beneficioso, contribuyendo al inédito aumento de la participación laboral femenina.
Economistas sugieren que el teletrabajo ha sido un factor clave en este aumento, ofreciendo a las madres una mayor flexibilidad para equilibrar el trabajo y el cuidado de la familia. Aunque la discusión postpandémica se centra en la permanencia del teletrabajo, las actitudes hacia la flexibilidad serán determinantes. Si se mantienen antiguas percepciones negativas, incluso con opciones híbridas, podría reforzarse la desigualdad de género.
La retención de mujeres en la fuerza laboral es crucial para la economía y los negocios. Empresas que reconocen esto ofrecen beneficios de maternidad extendidos. Sin embargo, la flexibilidad debe ir más allá de la retención y ser una herramienta para la equidad de género. El teletrabajo puede facilitar la permanencia en la fuerza laboral, pero es esencial garantizar que no limite las oportunidades de avance para las mujeres.
En última instancia, el teletrabajo ha avanzado hacia un mundo laboral más flexible, pero su verdadero impacto aún está por determinarse. A medida que evolucionamos, debemos esforzarnos por crear un entorno laboral que no solo permita la participación femenina sino que también promueva la igualdad de oportunidades y elimine estigmas asociados a la flexibilidad laboral.
Fuente: infobae.com