Un preso, luchador de artes marciales, les dio tremenda paliza a cuatro policías en una comisaría: SAME atendió a los 5

24-10-2022 - Por Primera Página

Un luchador de artes marciales mixtas detenido en Berisso, fue protagonista de un salvaje ataque que terminó con cuatro policías heridos y su propia internación, luego de que se golpeara a sí mismo contra la cama de concreto de su calabozo.

En un arranque de auténtica locura, el acusado primero intentó trenzarse a piñas con otros reclusos y tras lastimarse seriamente por su propia cuenta, le causó heridas de diferente consideración a todos los agentes que intervinieron para intentar evitar que se siguiera golpeando.


Todos los agentes sufrieron heridas de consideración. El agresor, en tanto, tuvo que ser internado tras golpearse con el borde de la cama de su calabozo.


Fuentes policiales informaron a 0221.com.ar que la dramática secuencia tuvo lugar alrededor de las 10.45 del último sábado, en las instalaciones de la comisaría Cuarta de la citada localidad.

De acuerdo con el testimonio de los testigos, todo habría comenzado con una serie de gritos provenientes del sector de celdas. Al acercarse para determinar qué estaba sucediendo, los efectivos descubrieron que el interno identificado como Pablo Ariel Pombo, de 27 años, insultaba a otros detenidos intentando trenzarse con ellos en una pelea.

De un momento a otro, habría comenzado a golpearse la cabeza con el borde de su cama de concreto, causándose un serio corte; y fue cuando los agentes intentaron calmarlo que la situación se volvió incluso más violenta, aseguran los policías.


Los uniformados declararon que "comenzó a lanzar piñas y patadas, golpeando la rodilla del oficial principal, luego mordió la tetilla de otro agente inspector, luego le dio un cabezazo en la nariz a otro efectivo y lanzó varias patadas hiriendo en ambas manos al cuarto agente, quien sufrió lesiones en la falange de uno de los dedos de su mano izquierda".


En medio del feroz ataque, Pombo finalmente logró ser reducido e inmovilizado hasta el arribo del personal del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME), que no solo atendió y trasladó al recluso a un hospital de la zona sino también realizó las curaciones necesarias al personal policial.

A raíz del severo ataque, la Justicia inició por su parte una investigación de los hechos e imputó al acusado por una nueva causa caratulada como "atentado y resistencia a la autoridad, lesiones agravadas y daños".