Desplome industrial: Pymes en riesgo por licuación del consumo y costos

27-03-2024 - Por Primera Página

El desplome de la industria en el inicio de 2024 ha generado una profunda preocupación entre los empresarios del sector. La caída del consumo, producto de la licuación del poder adquisitivo y el aumento de costos, está impactando directamente en las pequeñas y medianas empresas (pymes), que dependen en gran medida de la demanda interna.

Según datos de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (Fiel), la producción industrial ha experimentado una disminución del 5,6% durante el primer bimestre en comparación con el mismo período del año anterior. Esta situación se agrava aún más si se considera que la producción industrial se encuentra un 15% por debajo del último pico registrado en mayo de 2022.

Las cámaras empresariales de todo el país corroboran estos números, mientras que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) reportó una retracción del 12,4% en enero, el último dato disponible. Ante este panorama desalentador, cada vez más empresarios han comenzado a manifestar su preocupación por el impacto de la crisis en sus sectores.

En Santa Fe, la Federación Industrial (Fisfe) ha alertado sobre una disminución significativa en las ventas, ajustes en la producción y dificultades para mantener las plantillas de personal en más del 71% de las empresas desde diciembre. Estas cifras reflejan la grave situación que atraviesa el segundo PBI industrial del país.

El aumento en el costo de la energía y la flexibilización en las condiciones para importar productos de la canasta básica son factores adicionales que han generado inquietud en el sector. Empresas emblemáticas como Acindar han debido implementar medidas como suspensiones rotativas para sus empleados, mientras que otras, como Toyota, consideran la posibilidad de ofrecer retiros voluntarios debido a la caída de la demanda en el mercado local.

El titular de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, ha expresado su preocupación por el impacto de los aumentos en las tarifas de servicios públicos, que en algunos casos han alcanzado hasta un 300% en un mes. Esta situación, sumada a la caída en la demanda y los aumentos en los costos de producción, representa un desafío considerable para las pymes del país.

A pesar de las medidas implementadas por el gobierno para fomentar la competencia y reducir la inflación, sectores industriales como las pymes siguen enfrentando dificultades significativas. La incertidumbre en torno al futuro de la economía y la falta de señales de una pronta recuperación del mercado interno generan preocupación en el sector industrial argentino. En este contexto, la colaboración entre el Gobierno y las empresas será fundamental para superar los desafíos actuales y sentar las bases para un crecimiento sostenible en el futuro.