La Zona Roja de La Plata se ha transformado en la nueva grieta que divide a la amarilla capital bonaerense de sus vecinos municipios azules de Berisso y Ensenada, que acaban de salir con los tapones de punta a la altura de las rodillas platenses. Ni lerdos ni perezosos, los ediles oficialistas de ambos distritos bañados por el marrón Río de la Plata, emitieron un comunicado conjunto fustigando la medida.
Mario Secco y Fabián Cagliardi, ambos intendentes kirchneristas de Ensenada y Berisso respectivamente, instruyeron a sus bloques de concejales a cruzar duramente la iniciativa de Julio Garro, de mudar el espacio de ofertas sexuales diversas y callejeras, a la limítrofe avenida tripartita 122 (ruta provincial 11), en el tramo que va desde la calle 50 hasta la 55.
“Nos manifestamos conjuntamente en el más absoluto repudio a esta medida que intenta aplicarse de manera inconsulta con nuestros municipios. Cabe destacar que la avenida 122 es una ruta provincial y que para tomar cualquier medida debe ser necesariamente trabajada y consultada en tiempo y forma a todos los actores involucrados”.
"Espacio de Segregación: Nosotros y nosotras, como representantes de nuestras ciudades, estamos en total desacuerdo con la demarcación de espacios de segregación a los que se envía a personas y grupos específicos y que promueven la estigmatización y discriminación".
“Pedimos suspender cualquier procedimiento de reubicación que derive en situaciones de violencia y vulneración de derechos y entrar en una etapa de diálogo entre municipios".
