El mundo de los Registros del Automotor se ve convulsionado luego de que el Gobierno decidiera revertir la subida de los formularios y los ingresos de los encargados en estas oficinas.

Este aumento, que duró menos de un día, generó tensiones que llevaron a un encuentro en el Ministerio de Justicia con representantes del gremio.

En esa reunión, un funcionario admitió que no hay un plazo definido para futuros aumentos y advirtió sobre el plan oficial de reducir la cantidad de registros.

El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, ratificó este objetivo, señalando que casi el 40 o 50 por ciento de los registros están intervenidos y que el plan es ir reduciendo su número a través de la digitalización. Actualmente, hay 1554 registros en todo el país, con aproximadamente el 40% bajo intervención.

La noticia del aumento y su posterior reversión generó incertidumbre en el sector. La reducción de la cantidad de registros, si se lleva a cabo, sería un proceso gradual y complejo.

Se plantean preocupaciones sobre la absorción de la carga de trabajo adicional y la necesidad de más espacio y personal para gestionarla.

El gremio de los encargados comenzó a reclamar aumentos desde que asumió el gobierno de Javier Milei. Aunque la promesa oficial era esperar 90 días, finalmente se concedieron aumentos la semana pasada, argumentando la inflación reciente. Sin embargo, estos aumentos fueron anulados rápidamente después de que surgieran cuestionamientos dentro del Gobierno.

Esta decisión ha generado preocupación en la Asociación de Encargados de Registros (AAERPA) y entre los integrantes del sistema. Se teme que resulte en despidos, demandas judiciales y renuncias adicionales. Algunos encargados incluso podrían optar por no cumplir con sus obligaciones, lo que podría tener consecuencias legales.

La posible desaparición de registros también plantea preocupaciones sobre la seguridad jurídica de los propietarios de vehículos y la economía en general, ya que esto podría llevar a aumentos significativos en los seguros de autos, entre otros problemas.

El Gobierno busca superar la controversia sobre los aumentos y avanzar en la digitalización de los trámites en los registros. Sin embargo, el gremio destaca la importancia de mantener la presencialidad para aquellos que no pueden acceder a internet o necesitan asesoramiento personalizado.

Además, se ha iniciado una auditoría de registros intervenidos y una fiscalización digital de otros registros para garantizar la eficiencia y transparencia en el servicio.