A solo 3 días de las elecciones primarias, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) revelará el Índice de Salarios correspondiente a julio, factor determinante para decidir el próximo aumento de jubilaciones, la Asignación Universal por Hijo (AUH) y otras prestaciones que pagará la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) desde el 1° de septiembre.
Estimaciones privadas prevén que el incremento oscilará entre el 23,5% y el 25%, ubicando el haber mínimo en torno a los $88.000, sin contar bonos extraordinarios.
El aumento, que será el tercero del año, sigue la fórmula de movilidad establecida por ley, basada en la evolución de los salarios y la recaudación previsional del trimestre previo (abril-junio).
Hasta el momento, se conocen dos componentes del cálculo final: la recaudación destinada al organismo y el índice de remuneración promedio del sector privado (RIPTE), que aumentó un 26,13% en el segundo trimestre. Falta conocer el Índice de Salarios del INDEC, que sumó un alza de 14% entre abril y mayo, y cuyo resultado para junio será fundamental para definir el porcentaje final de mejora en los haberes jubilatorios y las asignaciones de ANSES.
Se espera que, debido a que la suba prevista en septiembre no alcanzaría a compensar la inflación, el Gobierno argentino implemente bonos de refuerzo en los próximos meses (septiembre, octubre y noviembre), como ha sucedido en años anteriores, para proteger el poder adquisitivo de las jubilaciones y asignaciones.
El ministro de Economía de la Nación y precandidato presidencial de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, confirmó recientemente que si el aumento según la fórmula de movilidad no es suficiente para compensar la inflación, se utilizarán recursos del Tesoro para sostener el poder de compra de las jubilaciones.
De confirmarse el aumento del 25% en septiembre, las prestaciones de ANSES se ajustarían de la siguiente manera: jubilación mínima de $87.963 (sin contar bonos extra), jubilación máxima de $596.683, prestación universal de adultos mayores (PUAM) de $70.937, pensiones no contributivas (PNC) de $75.106, Asignación Universal por Hijo (AUH) y Asignación Universal por Embarazo (AUE) de $17.330, y asignación por hijo del sistema SUAF de $17.330.
Estos aumentos beneficiarían a más de 18 millones de personas actualmente amparadas por ANSES, entre jubilados, pensionados y otros beneficiarios de asistencias sociales.